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Cristina Retana: Sublevación-libertad: Voluntad


Cristina Retana. Psicoanalista. Foto cortesía de Cristina Retana.




https://www.youtube.com/watch?v=enqgLPVqQbU&list=PLGG47IivS0zuaf2kt1RKfVA9rNBRk5h2O

Durante las mesas de investigación por Costa Rica, Cristina Retana presento esta lectura el domingo 22 de noviembre 2020.


Sublevación-libertad: Voluntad

Sublevación es un término que se viene trabajando desde el 2014, en la École Lacanienne de Psychanalyse, en París. Fue Jean Allouch, psiconalista francés quien lo propuso al psicoanálisis y lo retoma del filósofo francés Michel Foucault.

Allouch plantea cuatro proposiciones:

1. La vida de cada uno está construida en un acto de su libertad.

2. En la medida en que se ejerce esa libertad, recibe el nombre de sublevación.

3. Tal consiste en decirle que no a una alienación

4. Decir que no, es un separarse.

Para escribir acerca de este concepto haré referencia a una entrevista que le hizo Farès Sassine, filósofo libanés, a Michel Foucault después de un par de viajes que Foucault hizo a Irán. Se titula: “No puede haber sociedades sin sublevación”. Entrevista Agosto de 1979.

En esta entrevista Sassine le pregunta a Foucault, ¿qué lo llevó a interesarse en hablar de la sublevación en Irán? Él le responde que la lectura de un libro, que gracias a un accidente y a una convalecencia tuvo tiempo de leer. Se llama “El principio Esperanza” de Ernest Bloch. Era un libro poco conocido en Francia y planteaba un problema capital: que puede haber en el interior mismo de nuestra historia, una apertura, un punto de luz y de atracción, que nos da acceso, partiendo de este mundo hacia un mundo mejor donde hay que transformar la sociedad para que esto sea posible. Aquello que Foucault leía, lo comparaba con lo que se publicaba en ese momento todos los días, en los diarios, en Francia. Le enseñaban que en Irán estaba pasando algo que era un alzamiento, una sublevación y la singularizaba el no estar comandada por una ideología revolucionaria occidental, que además tampoco estaba guiada por un partido político, ni siquiera por organizaciones políticas. Foucault leía que lo que se daba en Irán era un levantamiento verdaderamente de masas y eso fue lo que él quiso ir a ver. Lo que él constata ahí fue una fuerza que se levantaba y nada la detenía. todo un pueblo que se alzaba contra ese régimen.

Foucalt dice: “no estoy de acuerdo con quien dijese, Inútil sublevarse, siempre será lo mismo”, él piensa que hay que ser respetuoso cuando una singularidad se subleva. Es muy importante, leer y escuchar lo que está detrás de una sublevación para poder entenderla.

La Sublevación se diferencia de la sumisión e implica un decir no, en palabras pero también en acto. Es un movimiento de libertad, se podría decir que es un acto no de libertad sino de “su” libertad, es no quedar detenido ante la libertad de los demás. Allouch nos dice, que hay un precio a pagar, que es el de no permanecer encarcelado en las prisiones del Otro. Resalto la importancia de que en la sublevación existe una cierta relación con la muerte.

Pero la sublevación no es reductible a la revolución iraní, puede surgir en todas partes, en cada uno, en la vida de cada uno, contra la familia, contra una relación sexual, una forma de pedagogía, un tipo de información, en nuestra vida profesional, en nuestro trabajo, en nuestra pareja, en nuestra fe y en nuestras convicciones políticas; no tiene un lugar específico y puede sobrevenir en cualquier momento, pero si se diera este movimiento de libertad la historia ya no volvería a ser la misma.

Otra pregunta de Sassine a Foucalt, fue: ¿qué conduce a la sublevación? pregunta que me hago continuamente. Por ejemplo, Didi Huberman, historiador y crítico francés, que escribe sobre la sublevación, se pregunta, “¿Qué nos levanta? ¿Qué hace que se produzca un movimiento, de la naturaleza que sea: violento o de resistencia, de éxodo o de rebelión interior, político, social o cultural, incluyendo desde luego el artístico, para que, al margen de su éxito, quede registrado en los anales de la historia o, al menos, de una historia?” Porque como dije anteriormente, después de una sublevación la historia ya no será la misma.

En la respuesta dada por Foucault a Sassine, le dice que lo que conduce a una sublevación es la voluntad. Señala que la voluntad no es razón, ni es deseo, pero no es una decisión puramente irracional, tampoco vaciada de deseo, la voluntad es lo que fija para un sujeto su propia posición.

Jean Allouch manifiesta que la voluntad es una decisión de la consciencia.

Por lo tanto en la sublevación se pone en juego la voluntad. En Francia, comenta Foucault que jamás se habla de ella, se habla de razón, de deseo, pero no de voluntad, que es quizás justamente la idea de que, más allá de todo cálculo y más allá de la inmediatez en el deseo, es la voluntad la que puede decir, “prefiero morir antes que morir”. En Irán sería, preferir arriesgarse a la muerte (perder la vida) antes de morir a fuego lento (prolongando una vida sin vida) en otras palabras, prefiero morir bajo las metralletas, que morir bajo el dominio de ese régimen. Se puede resumir que en la sublevación hay un movimiento de su libertad, llevada por la voluntad del sujeto.

Para concluir deseo realizar algunos puntos de enlace entre performance y psicoanálisis. Entre ellos, además de la sublevación, y ese deseo constante hacia la/su libertad, comparten el interés por el cuerpo y un poco de locura.

Hablando acerca del cuerpo, en el año 2016, se editó en Costa Rica, un cuaderno titulado El cuerpo tras la huella. Marcas cicatrices, heridas y tatuajes, en el cual publiqué un artículo que nombré El tatuaje: ¿una escritura?. En éste, quise ejemplificar una de las diferentes maneras de cómo un cuerpo puede ser leído.

Finalmente, acerca de la locura, el psicoanálisis tiene mucho por decir y yo también. Entré al análisis por la locura y ocupé el lugar de la analista para escucharla.

Para ejemplificar lo anterior, aludo a una entrevista recientemente realizada por Stephane Breton a Jean Allouch. En ella, él dice que el psicoanálisis fue y sigue siendo una invención de la locura, (locura no como enfermedad mental o psíquica). Además quien practica el ejercicio del psicoanálisis, tiene que haber lidiado de cerca con la locura, haber transitado por esos caminos, haberse tropezado con ella.

En la locura una libertad se subleva, nos dice Allouch y que estar advertidos de esto, modifica la forma en que hasta hoy fue acogido el psicoanálisis.

Sublevación, libertad, voluntad, cuerpo y locura… Performance y psicoanálisis.


Agradecimientos

A Alexander Chavez, Christin Sibaja, y colaboradores.


Bibliografía

Allouch Jean. No hay relación heterosexual. Epeel. México. 2017

Allouch Jean. Nuevas observaciones sobre el pasaje al acto. 1 Ed. Córdoba. Ediciones Literales. 2019

Allouch Jean. La escena Lacaniana y su círculo mágico. Unos locos se sublevan. 1 ed. Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El Cuenco de Plata. 2020.

Foucault Michel. ¿Inútil sublevarse? PDF.

Me cayó el veinte. #31 ¿Qué con la espiritualidad? Ed Me cayó el veinte. México. 2015

Rodolfo Marcos-Turnbull. Salomé. 1 Ed. Ed Me cayó el veinte. México 2020

Georges Didi-Huberman. Sublevaciones. Publicado con motivo de la exposición Sublevaciones (del 24 de febrero al 29 de julio de 2018) organizada por el Jeu de Paume, París, en colaboración con el Museo de arte contemporáneo. UNAM, México.

Claroscuro. Cuadernos de psicoanálisis. El cuerpo tras la huella. Marcas, cicatrices, heridas y tatuajes. 1 ed. VivEros. Costa Rica. 2016.

George-Henri Melenotte. En: la lucura como sublevación: Una voluntad insurrecta contra el discurso psiquiátrico. Revista Ñácate. Ecole lacanienne de phychanalyse. Uruguay. 2016



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